lunes, 1 de junio de 2009

Las acciones de los psicópatas y géneros


Para saber por dónde va el psicópata sólo debemos estar atentos a lo que dice o hace el manipulado. El manipulado es la boca y el accionar del psicópata. Es el que da la cara por él. Es el usado como herramienta. El entorno psicópatico y los manipulados repiten las mismas falsedades. Es la difamación de la víctima a la que todos los psicópatas se unen. A no ser que se de un enfrentamiento entre psicópatas, entonces ambos buscan aliados para enfrentarlos. Usan a los demás como armas arrojadizas.

En cuanto al género hay hombres, mujeres, niños (de todas las edades) y no hay que buscar lejos, están entre nosotros haciéndose pasar por seres con remordimientos y conciencia. No tienen sentimientos de amor, compasión o pena, pero los manejan perfectamente para manipular a los que no son como ellos.

Sus tonos de voz son esclarecedores y los hay de varios tipos: Los que optan por las tonalidades suaves y bajas mientras malmeten sutilmente como si fuesen verdaderos ángeles celestiales o los hay que sus tonos son despreciativos e impositivos como si fuesen superiores. Ambos son psicópatas, pero de modalidades diferentes. Los más descarados son los que perpetuamente tienen los gestos agrios, como si permanentemente estuviesen enfadados, son los más detectables. Luego están los de cara angelical y sonrisa cínica. Son los que malmeten con sutileza infinita, pero sus palabras siempre dan a entender algo malo sobre alguien y después acusan a la víctima de haberlo dicho, pero sin comprometerse.

Hay psicópatas que no paran de preguntar
sobre todo lo que hacemos en nuestra vida. Son esas personas a las que cotidianamente se las llama cotillas, después se dedican a difamar. Y hay psicópatas que escuchan y observan a todas horas para luego manipular esa información añadiendo su particular dosis de daño por la espalda.

Todos éstos psicópatas pretenden pervertir a las víctimas y si no lo consiguen pasarán a ser difamadas, porque son víctimas resistentes y con fuertes valores morales. Esos que le recuerdan al psicópata lo que no es. Por eso las odia, pero no es un odio directo y claro, es un odio recóndito y enmascarado, se hace por la espalda y a traición, sin dar posibilidad a la víctima de defenderse y utilizándo a otros. El psicópata crea a las víctimas un entorno hostil que durará siempre, desde que el psicópata abandona la fase de seducción.